Por: Elaine Hernández – Editora Fundación sabores Dominicanos.
La experta en periodismo y escritora gastronómica recomendó al criticar o escribir ficción gastronómica, saber el origen de cada ingrediente y cómo estos conectan con el resto del mundo.
Yanet Acosta, quien durante los días 22 y 23 de junio impartió los talleres sobre “Crítica gastronómica” y “Gastroficción”, instó al público asistente a “desarrollar la curiosidad de preguntarse ante cada plato, el origen de sus ingredientes y cómo estos se relacionan con otras culturas del mundo”. “En la crítica y la ficción gastronómica es básico tener en cuenta la historia y geografía de los ingredientes”, agregó.
Estas jornadas, organizadas por la Fundación Sabores Dominicanos, finalizaron en el 23 junio, tras una serie de eventos y visitas por los medios de comunicación encabezados por la escritora española Yanet Acosta, quien vino al país “a despertar esa curiosidad por el conocimiento y a ofrecer herramientas para que se haga una divulgación gastronómica profesional”.
Acosta inició su participación de cara al público el pasado martes 21 de junio al dictar la conferencia magistral “La gastronomía y el periodismo como herramientas para construir una marca país”, en la que tuvo como contraparte dominicana a Luis José Chávez, presidente de la Asociación Dominicana de Prensa Turística, ADOMPRETUR.
El miercoles 22 de junio impartió a periodistas, escritores, blogueros, chefs, estudiantes de hotelería y profesionales vinculados a este tema, el taller sobre “Crítica gastronómica”. Acosta inició dicho taller diciendo que “La formación es vital, ya que la función que desempeña el periodista gastronómico es de guía alimentario”, y agregó que “quien asume el reto de escribir sobre la cultura culinaria debe tener un paladar exquisito, el cual – dice -, puede entrenarse. Debe además saber ser una persona con principios éticos”.
El periodista gastronómico debe ofrecer información con fondo, profundidad y aportar conocimientos usando como herramientas los diferentes géneros periodísticos, entre los que desglosó: la crónica, el reportaje, la entrevista, la reseña, la columna de opinión, las guías gastronómicas y la crítica gastronómica, de la cual destacó “es un género muy literario y en el que se tiene más implicación sobre lo que se escribe”.
A diferencia de otros géneros, “una buena crítica gastronómica debe incluir descripción, no solo del plato, sino también del ambiente, del restaurante y los demás comensales. Requiere además de contextualización de la tendencia del chef o el restaurante, información sobre el origen e historia de sus ingredientes, una interpretación del plato según su propio juicio, y finalmente un juicio o valoración del mismo”, puntualizó Acosta.
Por otro lado, en el taller de Gastroficción, impartido el pasado jueves 23 de junio, la autora de la obra “El chef ha muerto” analizó los diferentes géneros literarios que han servido de inspiración para el desarrollo la ficción gastronómica o “gastroficción”, entre los que mencionó el cuento, la novela, el relato y el microrrelato.
Asimismo, la directora de The Foodie Studies, reveló que la literatura negra juega un rol muy importante en la gastronomía, debido a su carácter social y acercamiento con la realidad.
Los participantes escribieron varios microrrelatos inspirados en catas realizadas durante el taller, así como ejercicios de evocación de los platos amados y odiados para la construcción de personajes que protagonizarían sus creaciones literarias.
Finalmente, Acosta resaltó que la inclusión de recetas en los escritos literarios puede ser una valiosa herramienta para darle un punto de descanso al lector. Recordó que para usar este recurso se debe dominar el uso de ingredientes y cantidades. La escritora citó a “Como agua para chocolate” y “Afrodita” de Laura Esquivel e Isabel Allende, respectivamente, como obras que han usado este recurso de manera magistral.
Los asistentes a ambos talleres recibieron un certificado de participación, el cual está validado por The Foodies Studies y la Fundación Sabores Dominicanos.
Tras la celebración de ambos talleres realizados en el Salón Acuario del hotel Barceló Santo Domingo, surgieron varias propuestas a las que la Fundación Sabores Dominicanos dará seguimiento a fin de fortalecer la promoción de la gastronomía dominicana.