Por: Laura Alejandra Castro Herrera – Comunicaciones Levapan.
“Conozca cómo marinar, macerar y adobar con éxito”
En el inmenso mundo de la gastronomía existen diferentes técnicas, bien sea para preparar los mismos alimentos de una forma u otra o simplemente para llevar a cabo determinado paso en una receta. En este caso, se explicarán las diferencias entre marinar, macerar y adobar. Tres procesos que suelen ser confundidos entre sí por la similitud en su ejecución pero que tienen objetivos diferentes.
Marinar:
En este caso, el alimento debe ser sumergido en el ingrediente deseado por determinado tiempo; existen diferentes opciones y con cada una de ellas, se obtienen diversos resultados. Cuando se realiza este procedimiento, algunos alimentos, no necesariamente deben ser cocinados después; por ejemplo, los ceviches o el salmón marinado.
En esta técnica lo que se busca principalmente es ablandar los alimentos, darles más jugosidad, potenciar el sabor, aromatizar los alimentos o conservarlos por más tiempo. Para llevar a cabo este proceso se puede usar vinagre y limón, los cuales ablandarán el alimento y harán que se preserve por más tiempo. El vino, el cual modificará y mejorará el sabor del producto. El aceite, el cual protegerá la preparación de los microorganismos, en especial la carne. Y finalmente, se pueden emplear algunas hierbas y especias para potenciar los sabores o aromatizar.
Macerar:
En esta técnica el alimento también debe ser sumergido en el o los ingredientes elegidos; sin embargo, esto se realiza con la única intención de aromatizar, ablandar y conservar por más tiempo las preparaciones.
Para realizar un buen macerado, generalmente se emplean unos ingredientes básicos como: Aceite, limón, licor, especias y hierbas. En este caso, se pueden macerar alimentos dulces o salados, incluso, las frutas y las verduras también se pueden someter a este procedimiento. Generalmente, el tiempo de maceración es diferente para cada receta; sin embargo, se recomienda que el tiempo de reposo no sobrepase las 24 horas, incluso, bastará con una noche para obtener el resultado deseado.
Adobar:
En este caso, se trata de un caldo o salsa con la cual se sazona un alimento determinado; generalmente, esta técnica se emplea en las carnes. Este procedimiento es clásico en España y se dice que la receta original es una mezcla entre aceite o vinagre, pimentón rojo, ajo, orégano o sal. Sin embargo, en la actualidad y especialmente en América Latina, es muy común que esto se realice únicamente con aceite y otro ingrediente que puede variar según la preparación.
Para realizar esta técnica, se puede sumergir el alimento en la mezcla o sencillamente se puede pintar con un pincel el filete de carne. Las variaciones en la preparación darán resultados diferentes, pero sin duda, deliciosos.
¡Atrévase a explorar estas técnicas en su cocina, el paladar de sus clientes se lo agradecerá!
Bibliografía: https://bit.ly/32kDV9d | https://bit.ly/3Fd3ozY | https://bit.ly/3pfxfSL